Mi mujer llevaba tres años muerta
Colgué y casi me desmayé
Las llamadas seguían ocurriendo
Su voz parecía cada vez más cercana
Ya no lo podía aguantar más
Lentamente me estaba volviendo loco
Decidí por fin ir al cementerio
Me acerqué ( andando) lentamente a la tumba de mi mujer
Había habido una tormenta la noche anterior
Un poste telefónico había caído
Uno de los cables había caído justo en la tumba de mi mujer